Los trabajos en hormigón entrañan riesgos
- El hormigón fresco es abrasivo y cáustico por naturaleza. Puede irritar y quemar fácilmente la piel si no se protege. La mejor manera de protegerse de las quemaduras de hormigón es cubrirse la piel y lavar el hormigón que haya entrado en contacto con ella. Seguridad en los trabajos con hormigón
- Resbalones, tropiezos y caídas- Las barras de refuerzo, el trabajo de encofrado, el suelo irregular y las herramientas presentan muchos riesgos de tropiezo en un área de trabajo de hormigón.
- Es importante utilizar las herramientas correctamente con el agarre y el movimiento adecuados. Si se hace girar un martillo con demasiada fuerza o se pierde el control, se puede producir una lesión a uno mismo o a otro trabajador de la zona. Los trabajadores deben llevar cascos cuando estos riesgos aéreos están presentes. Utilizar un observador para comunicarse con el operador del equipo y con los trabajadores en el suelo es una forma eficiente de controlar y comunicar los movimientos de un vertedero o pluma.
- Lesiones por manipulación manual – Hay mucho trabajo físico en el trabajo del hormigón. Los trabajadores deben practicar técnicas de elevación seguras o utilizar un sistema de compañeros cuando levanten objetos pesados o incómodos.
ESTADÍSTICAS
- Más de 250.000 personas trabajan en la fabricación de hormigón.
- Más del 10% de esos trabajadores -28.000- sufrieron una lesión o enfermedad relacionada con el trabajo y 42 murieron en sólo un año.
- Peligros potenciales para los trabajadores de la fabricación de hormigón:
- Irritación de los ojos, la piel y las vías respiratorias por la exposición al polvo de cemento;
- Protecciones de seguridad inadecuadas en los equipos;
- Sistemas inadecuados de bloqueo y etiquetado en la maquinaria;
- Sobreesfuerzo y posturas forzadas;
- Resbalones, tropiezos y caídas; y
- Quemaduras químicas provocadas por el hormigón húmedo.