HECHOS
- Los trabajos que conllevan mayores índices de estrés exponen a los trabajadores a un mayor grado de daño o peligro personal están dentro de los trabajos de cuello azul.
- Los estudios indican que los trabajadores pueden sentirse más obligados a buscar alivio a través de la automedicación en los trabajos en los que la fatiga, la depresión, el miedo o la vergüenza son habituales.
- El abuso de sustancias suele ser visto por muchos como un mecanismo de afrontamiento. Debido al elevado estrés de numerosas industrias, muchas personas recurren al consumo de drogas o alcohol para hacer frente a sus trabajos.
- El abuso de sustancias es un problema creciente debido a la disponibilidad de drogas y alcohol, el aislamiento laboral, la salud mental dentro y fuera del trabajo, el estrés y la cultura social.
ESTADÍSTICAS
- Alrededor del 70% de los 14,8 millones de estadounidenses que se calcula que consumen drogas ilegales están empleados, y los trabajadores que declaran haber tenido tres o más empleos en los cinco años anteriores tienen aproximadamente el doble de probabilidades de ser consumidores actuales o del año anterior de drogas ilegales que los que han tenido dos o menos empleos.
- En la mano de obra estadounidense, la tasa de detección de anfetaminas (presentes en drogas como Adderall), marihuana y heroína ha aumentado anualmente durante los últimos cinco años. El consumo de cocaína aumentó un 12% respecto a 2015, alcanzando un máximo de siete años.
- Alrededor del 16% de los empleados viven con un trastorno por consumo de sustancias. Este estudio informó que la tasa más alta de trastornos por medicamentos recetados se encuentra entre los trabajadores del sector de servicios. Los investigadores dividen los 81.000 millones de dólares que se gastan al año en el abuso de drogas en el lugar de trabajo en tres categorías:
- Absentismo laboral
- Costes sanitarios
- Pérdida de productividad
- Se calcula que el 80% de los consumidores de drogas apoyan su consumo robando en su lugar de trabajo. Desde los opioides hasta el alcohol, pasando por los medicamentos con receta y las drogas recreativas, los trabajadores toman medidas drásticas para ocultar su adicción.