
HECHOS
- La delincuencia en las explotaciones agrícolas puede tener efectos devastadores para los agricultores y sus familias: financieros, psicológicos y sociales. La delincuencia también puede tener implicaciones nacionales, si interrumpe o daña la producción agrícola.
- La delincuencia en el sector agrario es significativa, con unas pérdidas anuales estimadas en 5.000 millones de dólares. Los delitos agrícolas incluyen el robo de ganado, cosechas, equipos, productos químicos y pesticidas, así como el vandalismo y otras formas de delitos contra la propiedad.
- Los costes de la delincuencia se trasladan a los consumidores en forma de precios más altos o son absorbidos por los agricultores en forma de menores beneficios.
- A pesar de la magnitud de la delincuencia en este sector, los criminólogos y los responsables de las políticas de justicia penal han prestado muy poca atención a la delincuencia agrícola.
ESTADÍSTICAS
- Cuatro de cada cinco agricultores (80,8%) declaran haber sido víctimas de algún tipo de delito agrícola.
- La reincidencia es elevada. Tres de cada cuatro agricultores (76,8%) declararon haber sido víctimas de delitos en dos o más ocasiones, y casi una cuarta parte (23,3%) lo fueron siete o más veces.
- El tipo de delito más denunciado por los encuestados fue el allanamiento de su propiedad (49,9%). El tiro y la caza ilegales (40,7%), el robo de ganado (39,4%) y el allanamiento de propiedades agrícolas (32,4%) también ocuparon los primeros puestos de la lista.
- Las granjas y los campos de las zonas agrícolas han sido blanco del robo de depósitos portátiles de combustible y gasóleo de uso agrícola, de 100 a 600 galones cada vez.
- A pesar de estos importantes niveles de victimización, los agricultores suelen mostrarse reacios a denunciar los delitos agrícolas a la policía. Por ejemplo, sólo dos tercios (66,7%) de las víctimas denunciaron el robo de ganado a la policía. Y el allanamiento de morada y los disparos y la caza ilegal fueron denunciados por los agricultores menos de la mitad de las veces.
- Otras razones para no denunciar son la creencia de que el delito no es lo suficientemente grave como para denunciarlo o la preocupación por la venganza en una comunidad pequeña (casi el 40%).