Farming Dust Meeting Kit – Spanish

QUÉ ESTÁ EN RIESGO
La exposición al polvo de cereales, el moho, el polen, la caspa de animales, el polvo del suelo, los humos de soldadura y los gases de escape de motores diésel puede provocar graves problemas respiratorios. Aunque son menos tóxicos que algunos productos químicos, los polvos están suspendidos en el aire y pueden penetrar fácilmente en los pulmones y causar daños.
Entre los procesos que generan polvo de grano se incluyen:
- la recolección del grano y su traslado de las cosechadoras a los remolques;
- limpieza, preparación y secado del grano
- mover el grano en un almacén de grano;
- el traslado de grano dentro o fuera de almacenes o terminales;
- moler y mezclar grano seco
- alimentación con grano seco molido;
- mantenimiento de instalaciones y equipos;
- limpieza de edificios, vehículos, instalaciones y equipos con aire comprimido.
CUÁL ES EL PELIGRO
PROBLEMAS RESPIRATORIOS DE LOS TRABAJADORES
Las enfermedades respiratorias (enfermedades que afectan a los pulmones y a los conductos respiratorios) son uno de los principales riesgos para la salud en el trabajo. Los estudios han demostrado que la exposición de los trabajadores al polvo de cereales es considerable.
Los trabajadores con enfermedades respiratorias ocupacionales pueden desarrollar problemas respiratorios permanentes, quedando discapacitados e incapacitados para trabajar.
Cuando se respira polvo agrícola, las partículas pueden alojarse en los pulmones y causar efectos sobre la salud. Cuanto más pequeña es la partícula de polvo, más profundamente puede penetrar en el tejido pulmonar. Si fuma o padece alguna enfermedad respiratoria, puede ser más susceptible a la exposición al polvo. Los efectos a corto plazo pueden incluir estornudos, tos y dificultad para respirar.
A largo plazo, los efectos crónicos de la exposición al polvo pueden incluir congestión pulmonar, bronquitis crónica, neumonía y diferentes sensibilidades y alergias al polvo. La exposición crónica al polvo puede provocar enfermedades respiratorias graves como asma, enfisema y pulmón de granjero.
COMO PROTEGERSE
Buenas prácticas contra el polvo agrícola
Identificación
Para reducir su exposición al polvo agrícola, inspeccione su área de trabajo y sus tareas para determinar qué trabajos y actividades realiza y en qué áreas trabaja que generan polvo. Una vez identificadas estas áreas y tareas, busque formas de reducir la exposición al polvo.
Programa de protección respiratoria
Antes de utilizar protección respiratoria, disponga de un programa de protección respiratoria que incluya una evaluación médica y pruebas de ajuste de la mascarilla. Utilice y mantenga correctamente las mascarillas de acuerdo con su plan de protección respiratoria y las recomendaciones del fabricante para reducir su exposición al polvo agrícola.
Medidas de control
Cuando no sea posible evitar el polvo de grano, a lo siguiente:
- cambiar los procesos y actividades para reducir el polvo de grano en su origen.
- segregar los procesos de los trabajadores expuestos.
- cerramiento del proceso.
- ventilación local por aspiración (LEV).
- buena ventilación general.
- Organizar el trabajo para reducir al mínimo el número de personas expuestas y la duración, frecuencia y nivel de exposición;
- manipulación adecuada de los materiales.
- buen mantenimiento de las instalaciones y los equipos.
- buena limpieza (no utilizar cepillos ni aire comprimido, y nunca utilizar aire comprimido para eliminar el polvo de la ropa).
- informar y formar a los empleados sobre el uso de las medidas de control.
CÓMO ELEGIR UN RESPIRADOR
Pruebas y homologación: Todos los respiradores utilizados en actividades agrícolas deben estar homologados por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (NIOSH).
Uso adecuado: Muchos problemas se derivan del uso de un respirador inadecuado. Por ejemplo, las máscaras antipolvo no reducen los vapores químicos. Un respirador aprobado para su uso con productos químicos puede no filtrar el polvo.
Utilice siempre un respirador adecuado para la tarea: El contaminante específico para el que está aprobado el respirador estará escrito en el filtro del cartucho o en las instrucciones que acompañan al respirador.
Clasificación adecuada: Como parte del proceso de prueba, a un respirador se le asigna un “factor de protección”, o calificación PF, que indica qué tan bien el respirador puede realizar su trabajo. Para las actividades agrícolas, utilice siempre un respirador con una clasificación PF de 10 o superior.
Tamaño y ajuste adecuados: El respirador debe formar un buen sello con la cara del usuario para que pueda funcionar correctamente. El polvo que se cuela a través de un mal sellado va directamente a los pulmones.
Las mascarillas de respiración están disponibles en varios tamaños y diseños para adaptarse a la mayoría de las caras: Las gafas, la ropa y el vello facial, como la barba o las patillas, pueden interferir en el sellado. Todas las mascarillas de respiración deben ser probadas por profesionales de la seguridad.
Coste: Los respiradores pueden ser desechables o no desechables. Los respiradores desechables son económicos y pueden desecharse cuando se ensucian o cuando se termina el trabajo.
La condición física del usuario: El usuario de un respirador purificador de aire debe estar en buenas condiciones físicas. Dado que el aire se aspira a través de un mecanismo de filtrado, la respiración se hace más difícil y puede causar estrés a las personas con problemas médicos.
CONCLUSIÓN
Las mascarillas de respiración pueden prevenir este tipo de dolencias respiratorias relacionadas con la agricultura de producción, pero sólo si las lleva puestas. Asegúrese de elegir el tipo de mascarilla adecuado para los riesgos a los que se va a enfrentar. En poco tiempo, el uso de mascarillas de respiración se convertirá en un hábito.