Oil and Gas Extraction Fatality File – Spanish

Marido y mujer mueren en una fuga de gas en un yacimiento petrolífero de Texas mientras sus hijos esperaban en el vehículo

Una compañía de yacimientos petrolíferos en el oeste de Texas enfrenta cargos después de que un esposo y su esposa murieran por una fuga de gas dentro de una instalación propiedad de la compañía, mientras sus hijos los esperaban en un vehículo afuera, según el Departamento de Justicia. Los cargos, anunciados el martes 8 de marzo, se derivan del incidente fatal del 26 de octubre de 2019, dijeron las autoridades en un comunicado de prensa. Esa noche, Jacob Dean -empleado de Aghorn Operating Inc, con sede en Odessa- recibió una llamada para comprobar una casa de bombas situada en un yacimiento petrolífero en Odessa, según los funcionarios federales.

No regresó a casa cuando se esperaba y no respondía a las llamadas de su esposa, Natalee Dean. Preocupada, se dirigió a la caseta de bombeo para ver cómo estaba su marido, llevando consigo a sus hijos, de 6 y 9 años. Mientras los niños esperaban en el vehículo, ella entró a buscar a su marido y no volvió a salir.

“Una bomba había fallado en la sala de bombas, provocando una fuga de agua producida que contenía sulfuro de hidrógeno”, dice el comunicado. El agua producida es un subproducto de la producción de petróleo y gas y puede contener sustancias químicas nocivas. “Jacob había sido alcanzado por el sulfuro de hidrógeno en la sala de bombas, y cuando Natalee llegó a la estación, salió del vehículo y se dirigió a la sala de bombas, donde también fue alcanzada por el gas”, dice el comunicado, añadiendo que ambos fueron declarados muertos en el lugar por los primeros en responder.

“Aghorn era consciente de que el agua que producía contenía grandes cantidades de H2S, así como de la naturaleza mortal del gas”, se lee en la acusación, en la que se alega que Aghorn y su vicepresidente “violaron a sabiendas su deber general de impedir la liberación accidental [del gas]” y pusieron vidas en peligro a sabiendas. McClatchy News se puso en contacto telefónico con Aghorn Operating Inc. y la empresa declinó hacer comentarios. El gas sulfhídrico es incoloro pero tiene un “fuerte olor a huevos podridos”, según los CDC. Dependiendo de la concentración, las personas expuestas al gas pueden sufrir un colapso en cuestión de minutos o un “knockdown”, o colapso inmediato, en una o dos respiraciones, según la Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo.

Aghorn Operating Inc. y el vicepresidente de la empresa, Trent Day, están acusados de “obstruir” la investigación sobre la muerte de la pareja y de infringir la Ley de Aire Limpio, según las autoridades federales. Aghorn, Day y otra empresa llamada Kodiak Roustabout Inc. también están acusados de infringir la Ley de Agua Potable Segura y de “hacer declaraciones falsas” a funcionarios estatales “sobre la integridad mecánica de los pozos de inyección de Aghorn”.