
HECHOS
- Fuerza excesiva: Muchas tareas de trabajo requieren cargas de fuerza elevadas en el cuerpo humano. El esfuerzo muscular aumenta en respuesta a los requerimientos de fuerza elevada, incrementando la fatiga asociada que puede conducir a los TME.
- Repetición excesiva: La alta repetición de tareas, cuando se combina con otros factores de riesgo como la fuerza elevada y/o las posturas incómodas, puede contribuir a la formación de TME.
- Postura incómoda: Las posturas incómodas ejercen una fuerza excesiva sobre las articulaciones y sobrecargan los músculos y tendones que rodean la articulación afectada. Las articulaciones del cuerpo son más eficientes cuando funcionan lo más cerca posible del movimiento medio de la articulación.
- Los peligros de resbalones, tropiezos y caídas aumentan el riesgo de una lesión repentina/aguda de los tejidos blandos.
- Los esguinces y las torceduras se consideran lesiones agudas de los tejidos blandos, lo que significa que son el resultado de un traumatismo repentino, como caídas, torsiones o golpes en el cuerpo.
- Son frecuentes las torceduras de espalda y de músculos isquiotibiales.
ESTADÍSTICAS
- La Oficina de Estadísticas Laborales informa de que en la industria privada se registraron 443.560 casos de esguinces, torceduras y desgarros con resultado de días de baja laboral durante un solo año.
- En el 36% de estos casos – o casi 160.000 – los trabajadores se lesionaron la espalda.
- Esguinces, desgarros y torceduras (aproximadamente 35 incidentes por cada 10.000 trabajadores a tiempo completo).
- Alrededor de 25.000 trabajadores sufren un esguince de tobillo cada día.
- Los esguinces y las torceduras son las lesiones laborales más comunes.
- Cada año se producen unos 628.000 esguinces.
- Esas 77.490 lesiones y enfermedades que requirieron días de baja laboral se tradujeron en 21.230 esguinces, torceduras y desgarros; 14.300 incidencias de agujetas o dolor; 10.180 cortes, laceraciones y pinchazos; y 9.920 fracturas.