
HECHOS
- El comportamiento indisciplinado puede desviar la atención del conductor de la carretera, aumentando el riesgo de accidentes.
- Los alumnos que se mueven o se enzarzan en altercados físicos pueden provocar lesiones.
- La conducta desordenada puede obstruir las salidas de emergencia, dificultando la pronta evacuación.
- La gestión del mal comportamiento puede elevar el estrés del conductor, perjudicando potencialmente su rendimiento al volante.
- El vandalismo o las peleas bruscas pueden provocar daños en el autobús, lo que conlleva costosas reparaciones.
- La falta de supervisión puede fomentar un entorno en el que se produzca acoso escolar, afectando al bienestar de los alumnos.
- Los incidentes derivados de una mala gestión del comportamiento pueden dar lugar a problemas legales y de responsabilidad civil para los distritos escolares.
ESTADÍSTICAS
- Entre 2013 y 2022, se produjeron 976 accidentes mortales de autobuses escolares en Estados Unidos, con un resultado de 1.082 muertos y 132.000 heridos. Aproximadamente 108 personas mueren y 13.200 resultan heridas anualmente.
- Aproximadamente el 53% de los estudiantes viajan en autobús escolar, lo que subraya la necesidad de una gestión eficaz del comportamiento para garantizar la seguridad.
- Los incidentes reportados de mala conducta de los estudiantes en las aulas aumentaron en un 56% durante el año escolar 2021-2022, lo que indica un posible aumento del mal comportamiento también en los autobuses escolares.
- En los EE. UU., el acoso es reportado como una ocurrencia común en los autobuses escolares por el 25% de los funcionarios de transporte escolar público, lo que destaca la necesidad de estrategias de gestión proactivas.
- En Canadá, los estudiantes que viajan a la escuela en autobús están 80 veces más seguros que los que viajan en coche, lo que subraya la importancia de mantener esta seguridad mediante una gestión adecuada de los pasajeros.
- Los autobuses escolares se consideran muy seguros en Canadá, donde las víctimas mortales representan menos del 0,1% de todos los accidentes mortales relacionados con vehículos de motor.